Tres ministros de 22 (dos de Valladolid y una de León). Ese es el marchamo de Castilla y León en el Gobierno que dio ayer a conocer Pedro Sánchez en el que se sentarán: la leonesa (de nacimiento) Margarita Robles , que mantiene la cartera de Defensa, y los vallisoletanos Óscar Puente y Ana Redondo, que se estrenan con las de Transporte y Movilidad Sostenible y Defensa, respectivamente. Los dos últimos dejarán el Ayuntamiento de Valladolid, donde el primero ha sido alcalde durante ocho años, y la segunda, concejala de Cultura, además de teniente de alcalde. De la política municipal -Puente era hasta ahora el líder de la oposición y Redondo, edil en la oposición- dan el salto a la nacional, esperado, en el caso del exalcalde, y toda una sorpresa en quien ha sido durante años su mano derecha. Conocidos los nombramientos, ayer fue día de valoraciones y, sobre todo, de poner sobre la mesa los primeros deberes a los ministros que, al ser de la tierra, tendrán una presión añadida. El portavoz de la Junta y consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, fue de los primeros en comentar la jugada para comenzar por recordar a Puente que en la Comunidad «tenemos muchas infraestructuras pendientes» . «Ojalá se puedan abordar y se puedan llevar a cabo en todas y cada una de las provincias que lo demandan, ya que lo hacen con justicia porque llevan mucho retraso», puntualizó. Apuntó, además, que este último año Castilla y León ha sufrido «especialmente» la reducción de inversiones del Estado, dado que solo se recortaron en dos autonomías, y una de ellas fue la castellano y leonesa. Por eso, criticó que «de momento» lo que sí se ha firmado es «incrementar las inversiones en una autonomía», en referencia a Cataluña. Además, para Carriedo, «más allá de los nombres» que formen el nuevo Consejo de Ministros, «lo más llamativo en esta ocasión es que las principales decisiones en España no se van a tomar en el Consejo de Ministro sino en Waterloo o en Suiza a través de unos verificadores, que van a ver en qué medida se van cumpliendo los compromisos asumidos para la gobernabilidad». Noticia Relacionada estandar No Los deberes de Puente con Castilla y León M. Gajate El soterramiento de Valladolid será uno de los primeros reclamos que llegará a su mesa, en la que se acumulan infraestructuras con retrasos históricos Más entusiasmo, lógicamente, hubo en las filas del PSOE de Castilla y León, que se mostraron eufóricas en las redes sociales con los tres nombramientos. Su secretario autonómico se despachó con un audio de 39 segundos en el que aseguró que se sienten «muy satisfechos» con un Gobierno «feminista y de marcado acento de Castilla y León». «Son tres magníficas noticias para nuestra tierra», dijo en referencia a Puente, Redondo y Robles, porque «la conocen, la respetan y la quieren. Nos han ayudado mucho en el pasado y nos van a servir de gran ayuda ante los grandes retos que tiene Castilla y León». El líder socialista en la Comunidad apuntó que el nuevo Ejecutivo «es muy bueno para España» porque «continúa con la política económica y de empleo que nos ha permitido superar dos importantes crisis económicas». «Un poco extraño» Algo menos satisfecho se mostró el alcalde de León, el socialista José Antonio Diez, quien reconoció que le resulta «un poco extraño» el nombramiento de dos ministros de Valladolid, aunque no cree que sea «algo que tenga preocupar». «Choca un poco, pero me importan los resultados, no de dónde sea la gente. Hemos tenido ministros de todos los sitios y no porque sean de aquí o de allí nos ha ido mejor o peor. Lo que espero es su trabajo», añadió. Desde el PP, su secretario autonómico, Francisco Vázquez, afirmó que el vallisoletano Óscar Puente, es «el albañil» que el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez , «ha contratado para levantar los muros». «Eso de levantar muros lo va a hacer perfectamente Puente», ironizó, además de calificar de «Gobierno de perdedores» el conformado por el jefe del Ejecutivo nacional, informa Ical. Mientras, en Soria ¡Ya! confían en que el nuevo ministro de Transportes, «tenga más sensibilidad con esta provincia que sus antecesores», con la mirada puesta, sobre todo, en la Autovía del Duero.Representantes de los sindicatos coincidieron en la oportunidad que supone para la Comunidad que dos ministros, como Puente y Redondo, sean de la Comunidad ya que «son garantía de nuevas políticas que repercutan en mejoras para Castilla y León» y conocen «perfectamente sus necesidades», señalaron los responsables autonçómicos de UGT y CCOO, Faustino Temprano y Vicente Andrés, respectivamente.
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