Cataluña inicia el trámite para prohibir las modalidades de 'correbous' más agresivas, como es el caso del toro embolado. Así lo ha acordado hoy el Parlamento catalán, que ha aceptado la proposición de modificación de la ley de 2010 sobre regulación de las fiestas tradicionales con 'bous' presentada por Comunes y la CUP. Los grupos de PP, Vox y Cs han votado en contra, mientras que el PSC se ha abstenido. Los republicanos, que también se han abstenido, han permitido a algunos de sus diputados votar a favor de la tramitación. Junts ha dado libertad de voto a sus diputados, aunque ninguno de sus representantes ha votado en contra de rechazar la modificación. En concreto, la propuesta presentada por Comunes y la CUP pretende vetar las modalidades más agresivas de 'correbous', como las que implican colocar bolas de fuego en los cuernos (' bous embolats '), las que llevan a conducir mediante sogas o cuerdas los animales (' bous enllaçats ') o las que se celebran en playas o puertos (' bous a la mar '), por el riesgo de que toros o vaquillas caigan al agua y se lastimen. La propuesta de modificación inicia ahora su trámite en comisión antes de que regrese al pleno para su aprobación definitiva o rechazo. De fondo, de nuevo, la contradicción que supuso la decisión del Parlament de prohibir las corridas de toros en 2010 (veto luego revertido por el Tribunal Constitucional), pero mantener vigentes los ' correbous ', muy arraigados en las comarcas del Ebro, donde grupos como Junts y ERC cuentan con un importante apoyo, y donde existe una gran cantidad de asociaciones que defienden la tradición. Noticia Relacionada ENFOQUE reportaje Si 'Correbous', la incómoda lidia del independentismo Anna Cabeza La tradición, muy arraigada en el sur de Cataluña, mantiene en polémica constante a ERC y Junts, que no cogen el toro por los cuernos Jèssica Albiach (Comunes) ha asegurado que si de ellos dependiera prohibirían cualquier espectáculo con animales vivos, pero que esta es ahora la proposición que puede salir adelante. Al respecto, Albiach ha recordado que según el Centro de Estudios de Opinión (CEO) de la Generalitat, «nueve de cada diez catalanes dicen que no está justificado el maltrato a un animal por motivos de tradición «. Del mismo modo, y frente al grupo de Vox que levantó la bandera la libertad para defender la continuidad de los 'correbous', recordó que la Comunidad de Madrid también ha prohibido, aunque con excepciones, el 'toro embolado'. También como partido proponiente, Dani Cornellà (CUP) ha recordado que toda tradición evoluciona, y que costumbres que se practicaban años atrás ahora no serían aceptadas. Alberto Tarradas (Vox), empleando la línea argumental de su partido, ha calificado el debate como el 'enésimo embate de la izquierda contra el mundo rural, la cultura, la tradición autóctona y la herencia de nuestros pueblos«. » Persiguen lo que desconocen y lo que no entra en su relato política. Y no todo es política«, ha concluido el representante de Vox. Lorena Roldán (PP) ha justificado su voto contrario por al apoyo del territorio a la tradición, sin rechazar que se pueden tomar medidas «para paliar el sufrimiento de los animales «. No obstante, ha apuntado, este »no es el propósito de la iniciativa«, sino que pretende sin más la prohibición, ha concluido. En nombre del PSC, el diputado Joaquim Paladella ha recordado que «la norma actual ya prohíbe infligir daño a los animales». Como alcalde de Batea (Tarragona) y representante del sur, «desde el territrio no nos gusta que decidan por nosotros. La gente del Ebro , del sur, no necesitamos que nadie nos tutele y decida nuestro futuro«. Esther Vallès (Junts) ha defendido la conveniencia de afrontar el debate, que reconoce complicado, y la oportunidad de mejorar la regulación durante su tramitación. Port su parte, Matías Alonso (Cs) ha explicado que entienden que el objetivo de la proposición no solo es una manera de garantizar el bienestar animal, sino como «una nueva vuelta de tuerca de la extrema izquierda y del 'lobby' animalista de acabar con la tauromaquia « como símbolo de la españolidad.
miércoles, 25 de octubre de 2023
Cataluña inicia el trámite para prohibir los 'correbous' más agresivos
Cataluña inicia el trámite para prohibir los 'correbous' más agresivos:
Cataluña inicia el trámite para prohibir las modalidades de 'correbous' más agresivas, como es el caso del toro embolado. Así lo ha acordado hoy el Parlamento catalán, que ha aceptado la proposición de modificación de la ley de 2010 sobre regulación de las fiestas tradicionales con 'bous' presentada por Comunes y la CUP. Los grupos de PP, Vox y Cs han votado en contra, mientras que el PSC se ha abstenido. Los republicanos, que también se han abstenido, han permitido a algunos de sus diputados votar a favor de la tramitación. Junts ha dado libertad de voto a sus diputados, aunque ninguno de sus representantes ha votado en contra de rechazar la modificación. En concreto, la propuesta presentada por Comunes y la CUP pretende vetar las modalidades más agresivas de 'correbous', como las que implican colocar bolas de fuego en los cuernos (' bous embolats '), las que llevan a conducir mediante sogas o cuerdas los animales (' bous enllaçats ') o las que se celebran en playas o puertos (' bous a la mar '), por el riesgo de que toros o vaquillas caigan al agua y se lastimen. La propuesta de modificación inicia ahora su trámite en comisión antes de que regrese al pleno para su aprobación definitiva o rechazo. De fondo, de nuevo, la contradicción que supuso la decisión del Parlament de prohibir las corridas de toros en 2010 (veto luego revertido por el Tribunal Constitucional), pero mantener vigentes los ' correbous ', muy arraigados en las comarcas del Ebro, donde grupos como Junts y ERC cuentan con un importante apoyo, y donde existe una gran cantidad de asociaciones que defienden la tradición. Noticia Relacionada ENFOQUE reportaje Si 'Correbous', la incómoda lidia del independentismo Anna Cabeza La tradición, muy arraigada en el sur de Cataluña, mantiene en polémica constante a ERC y Junts, que no cogen el toro por los cuernos Jèssica Albiach (Comunes) ha asegurado que si de ellos dependiera prohibirían cualquier espectáculo con animales vivos, pero que esta es ahora la proposición que puede salir adelante. Al respecto, Albiach ha recordado que según el Centro de Estudios de Opinión (CEO) de la Generalitat, «nueve de cada diez catalanes dicen que no está justificado el maltrato a un animal por motivos de tradición «. Del mismo modo, y frente al grupo de Vox que levantó la bandera la libertad para defender la continuidad de los 'correbous', recordó que la Comunidad de Madrid también ha prohibido, aunque con excepciones, el 'toro embolado'. También como partido proponiente, Dani Cornellà (CUP) ha recordado que toda tradición evoluciona, y que costumbres que se practicaban años atrás ahora no serían aceptadas. Alberto Tarradas (Vox), empleando la línea argumental de su partido, ha calificado el debate como el 'enésimo embate de la izquierda contra el mundo rural, la cultura, la tradición autóctona y la herencia de nuestros pueblos«. » Persiguen lo que desconocen y lo que no entra en su relato política. Y no todo es política«, ha concluido el representante de Vox. Lorena Roldán (PP) ha justificado su voto contrario por al apoyo del territorio a la tradición, sin rechazar que se pueden tomar medidas «para paliar el sufrimiento de los animales «. No obstante, ha apuntado, este »no es el propósito de la iniciativa«, sino que pretende sin más la prohibición, ha concluido. En nombre del PSC, el diputado Joaquim Paladella ha recordado que «la norma actual ya prohíbe infligir daño a los animales». Como alcalde de Batea (Tarragona) y representante del sur, «desde el territrio no nos gusta que decidan por nosotros. La gente del Ebro , del sur, no necesitamos que nadie nos tutele y decida nuestro futuro«. Esther Vallès (Junts) ha defendido la conveniencia de afrontar el debate, que reconoce complicado, y la oportunidad de mejorar la regulación durante su tramitación. Port su parte, Matías Alonso (Cs) ha explicado que entienden que el objetivo de la proposición no solo es una manera de garantizar el bienestar animal, sino como «una nueva vuelta de tuerca de la extrema izquierda y del 'lobby' animalista de acabar con la tauromaquia « como símbolo de la españolidad.
Cataluña inicia el trámite para prohibir las modalidades de 'correbous' más agresivas, como es el caso del toro embolado. Así lo ha acordado hoy el Parlamento catalán, que ha aceptado la proposición de modificación de la ley de 2010 sobre regulación de las fiestas tradicionales con 'bous' presentada por Comunes y la CUP. Los grupos de PP, Vox y Cs han votado en contra, mientras que el PSC se ha abstenido. Los republicanos, que también se han abstenido, han permitido a algunos de sus diputados votar a favor de la tramitación. Junts ha dado libertad de voto a sus diputados, aunque ninguno de sus representantes ha votado en contra de rechazar la modificación. En concreto, la propuesta presentada por Comunes y la CUP pretende vetar las modalidades más agresivas de 'correbous', como las que implican colocar bolas de fuego en los cuernos (' bous embolats '), las que llevan a conducir mediante sogas o cuerdas los animales (' bous enllaçats ') o las que se celebran en playas o puertos (' bous a la mar '), por el riesgo de que toros o vaquillas caigan al agua y se lastimen. La propuesta de modificación inicia ahora su trámite en comisión antes de que regrese al pleno para su aprobación definitiva o rechazo. De fondo, de nuevo, la contradicción que supuso la decisión del Parlament de prohibir las corridas de toros en 2010 (veto luego revertido por el Tribunal Constitucional), pero mantener vigentes los ' correbous ', muy arraigados en las comarcas del Ebro, donde grupos como Junts y ERC cuentan con un importante apoyo, y donde existe una gran cantidad de asociaciones que defienden la tradición. Noticia Relacionada ENFOQUE reportaje Si 'Correbous', la incómoda lidia del independentismo Anna Cabeza La tradición, muy arraigada en el sur de Cataluña, mantiene en polémica constante a ERC y Junts, que no cogen el toro por los cuernos Jèssica Albiach (Comunes) ha asegurado que si de ellos dependiera prohibirían cualquier espectáculo con animales vivos, pero que esta es ahora la proposición que puede salir adelante. Al respecto, Albiach ha recordado que según el Centro de Estudios de Opinión (CEO) de la Generalitat, «nueve de cada diez catalanes dicen que no está justificado el maltrato a un animal por motivos de tradición «. Del mismo modo, y frente al grupo de Vox que levantó la bandera la libertad para defender la continuidad de los 'correbous', recordó que la Comunidad de Madrid también ha prohibido, aunque con excepciones, el 'toro embolado'. También como partido proponiente, Dani Cornellà (CUP) ha recordado que toda tradición evoluciona, y que costumbres que se practicaban años atrás ahora no serían aceptadas. Alberto Tarradas (Vox), empleando la línea argumental de su partido, ha calificado el debate como el 'enésimo embate de la izquierda contra el mundo rural, la cultura, la tradición autóctona y la herencia de nuestros pueblos«. » Persiguen lo que desconocen y lo que no entra en su relato política. Y no todo es política«, ha concluido el representante de Vox. Lorena Roldán (PP) ha justificado su voto contrario por al apoyo del territorio a la tradición, sin rechazar que se pueden tomar medidas «para paliar el sufrimiento de los animales «. No obstante, ha apuntado, este »no es el propósito de la iniciativa«, sino que pretende sin más la prohibición, ha concluido. En nombre del PSC, el diputado Joaquim Paladella ha recordado que «la norma actual ya prohíbe infligir daño a los animales». Como alcalde de Batea (Tarragona) y representante del sur, «desde el territrio no nos gusta que decidan por nosotros. La gente del Ebro , del sur, no necesitamos que nadie nos tutele y decida nuestro futuro«. Esther Vallès (Junts) ha defendido la conveniencia de afrontar el debate, que reconoce complicado, y la oportunidad de mejorar la regulación durante su tramitación. Port su parte, Matías Alonso (Cs) ha explicado que entienden que el objetivo de la proposición no solo es una manera de garantizar el bienestar animal, sino como «una nueva vuelta de tuerca de la extrema izquierda y del 'lobby' animalista de acabar con la tauromaquia « como símbolo de la españolidad.
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